Fueron cerca de tres semanas apasionantes (concretamente 20 días), un viaje a Bolivia por libre al que finalmente incorporamos en nuestro itinerario unos días en el norte de Chile que, nos permitió descubrir dos países que, ya antes de conocerlos, despertaban nuestras pasiones cuando mirábamos mapas, la altura de sus volcanes o sus paisajes extremos.
El Salar de Uyuni, el desierto de Atacama o el Lago Titicaca fueron algunos de los lugares más impactantes que recorrimos durante esta ruta, pero nuestro viaje nos llevó a descubrir muchos lugares míticos en Bolivia, donde sus grandes ciudades están llenas de historia, y el norte de Chile, dónde los paisajes fueron el actor principal.
Índice
Itinerario viaje a Bolivia por libre – ruta de 20 días
Un viaje empieza desde el momento en el que compro el billete de avión, cuándo ya busco kilos de información en blogs, guías y todo tipo de fuentes que me trasladan ya al país, antes incluso de pisarlo.
Pero fisicamente, el viaje empieza cuándo salimos de casa, desde Barcelona, en dirección a Bolivia, esta vez con la aerolínea LATAM que, nos llevaría en un agradable viaje Barcelona – Lima – La Paz, hasta nuestro destino.
Día 1 – Barcelona – La Paz, llegada y primera parada de nuestro viaje a Bolivia
Llegamos a La Paz a las 3:30 am. En plena noche paceña empezaba nuestro viaje a Bolivia por libre. Nos recoge el transfer que habíamos dejado apalabrado con el hostal en el que íbamos a dormir. Aunque nos habían dicho que podía ser inmediato, de momento no notamos los síntomas del mal de altura y nos encontramos de maravilla.
El conductor nos lleva directamente a nuestro alojamiento, el Hostal Cruz de Los Andes, al que llegamos tras veinte minutos de trayecto aunque nos avisa que esto es muy poco habitual durante el día en la ciudad. Es un lujo circular por La Paz a estas horas, ¡no hay nada de tráfico!
Hacemos nuestro check in, nos dan una habitación a un precio rebajado por la hora de llegada (esto lo habíamos negociado antes de la reserva) y nos vamos a dormir inmediatamente, eran más de las 4:30 de la madrugada y teníamos que descansar para nuestro primer día en La Paz, que estaba a escasas horas de empezar.

Día 2 – La Paz
Suena la alarma cuatro horas después de irnos a dormir y aunque nos cuesta, el poder del desayuno y su hora de cierre hace que nos levantemos de la cama con más o menos pereza.
Después del primer desayuno en Bolivia, salimos a conocer la ciudad y rápidamente conocemos los primeros lugares imprescindibles que ver en La Paz ya que nuestro alojamiento está muy bien situado, en pleno centro histórico de la ciudad.

La majestuosa Basílica de San Francisco, la animada calle Sagarnaga o la coqueta calle Jaén ocupan las primeras horas y el día acaba con un recorrido por el Teleférico de La Paz, con unas vistas descomunales de la ciudad, y que no podemos esperar para conocer. Aunque nos ofrecen varios tours guiados por el Teleférico en el centro de la ciudad, decidimos ir por nuestra cuenta y lo pasamos en grande.
Después de comer, el mal de altura hace mella en Marta y nos retiramos a descansar y pasar lo que quedaba de día tranquilamente en nuestro alojamiento. No queríamos que nos pasara factura y nuestro viaje a Bolivia empezase con mal pie.
Día 3 – La Paz
Nos despertamos y notamos que ya estamos recuperados de los síntomas del mal de altura, así que salimos a conocer los que nos queda pendiente en la ciudad.
Paseamos por la Plaza Murillo, desde donde cogemos un taxi hasta el mirador Killi Killi, el más espectacular de la ciudad. A estas altura ya habíamos aprendido a medir nuestros esfuerzos y llegar hasta allí, aunque en el mapa pareciese cercano, nos dio cosilla. Desde allí bajamos caminando y nos dirigimos hasta la Plaza Sucre, previa parada en uno de los lugares que os recomendaba en este artículo con algunos lugares donde comer en La Paz, el popular ‘Paceña La Salteña’.
Por la tarde vamos hasta el barrio de Sopocachi y disfrutamos de las vistas del Mirador ‘El Montículo’.
La verdad es que, aunque sabíamos que La Paz no iba a ser lo mejor de nuestro itinerario, este viaje a Bolivia había empezado con muy buen pie.
¡Info! Transportes, qué ver, dónde comer…conoce todo lo que necesitas saber sobre la ciudad con esta guía práctica para visitar La Paz.
Día 4 – La Paz – Ruinas Tiwanaku – La Paz

Llegaba el momento de visitar uno de los lugares que más nos apetecía del país: las ruinas de Tiwanaku, para las que habíamos contratado el día antes un tour de día completo que salía y volvía a La Paz.
Disfrutamos de un día rodeados de historia y ruinas que, aunque deberían intentar conservarlas mejor, te transportan a miles de años atrás, cuando la cultura tiwanacota predominaba y dominaba en esta parte del mundo.
Fue un día increíble e incluir esta parada en la ruta de nuestro viaje a Bolivia por libre, fue uno de los grandes aciertos. Si os apetece conocer más sobre la experiencia y la historia del lugar, podéis leer aquí todo sobre nuestra visita a las ruinas de Tiwanaku y Puma Punku.
Consejo: Nosotros contratamos una excursión organizada de día completo a Tiwanaku que salía desde La Paz y pensamos que es ideal porque permite ganar tiempo y los precios son muy económicos. Puedes ver los precios y alternativas en los enlaces que tienes justo debajo:
1. Excursión día completo a Tiwanaku desde La Paz
2. Tour desde La Paz a las ruinas de Tiwanaku
Día 5 – La Paz – Copacabana
Llegaba otro de los momentos fuertes del viaje y que habíamos marcado a fuego en nuestro itinerario por Bolivia, era hora de ir a Copacabana, a orillas del mítico Lago Titicaca.
Nuestro autobús salía a las 7:15 am muy cerca del hotel y el trayecto de La Paz a Copacabana dura unas 3,5 horas con algunas peculiaridades, como la de cruzar el estrecho de Tiquina, una experiencia bastante curiosa.
Llegamos pasado el mediodía, nos instalamos en nuestro alojamiento, el formidable Ecolodge Las Olas y salimos a buscar algo de comer, los tickets del barco para ir el día siguiente a la Isla del Sol y por supuesto, a conocer un poco esta pequeña localidad que vive exclusivamente del turismo.
Además del imponente Cerro El Calvario, que subimos para disfrutar de las mejores vistas de la ciudad y el Lago Titicaca, hay algunos lugares interesantes que ver en Copacabana y que no dudamos en visitar, aunque para ser sinceros, no es la ciudad con más encanto del mundo.
Y como no es precisamente una ciudad seductora, nos retiramos a nuestro mágico alojamiento a disfrutar del lugar y de una increíble puesta de sol sobre el lago Titicaca antes de ir a cenar.
Día 6 – Copacabana – Isla de la Luna – Isla del Sol, los mejores momentos de nuestro viaje a Bolivia por libre
La siguiente parada en nuesto viaje a Bolivia por libre era la Isla del Sol. Cómo habíamos comprado la tarde antes nuestros tickets para ir a la Isla del Sol, nos dirigimos directamente al puerto de Copacabana a esperar nuestra embarcación, que para nuestra sorpresa salió muy puntual.
Compramos un ticket combinado que nos permitía hacer una primera parada en la Isla de la Luna, un pequeño rincón que merece la pena conocer, y tras esa breve visita, el barco se dirigió directamente a la Isla del Sol, a la que llegamos cerca de las 11 de la mañana y donde íbamos a pasar esa noche.
Después de dejar nuestras mochilas en el alojamiento, pasamos el resto del día disfrutando de un lugar que jamás hubiésemos pensado que nos iba a dejar tan impactados. La Isla del Sol fue sin ninguna duda uno de los grandes momentos de nuestro viaje en Bolivia. Y no lo digo por decir, podéis todo sobre nuestra visita a la Isla del Sol que, espero que sea capaz de transmitiros mínimamente las emociones que en nosotros despertó aquel lugar.
Una puesta de sol inolvidable en el Cerro Queñuani cerró un día único e irrepetible y uno de los mejores momentos de nuestro viaje. Jamás olvidaremos la Isla del Sol.

¡Info! Conoce todas las maneras, horarios y precios para llegar a la Isla del Sol desde Copacabana.
Día 7 – Isla del Sol – Copacabana – La Paz
Con el enamoramiento todavía en el cuerpo, desayunamos con vistas al Lago Titicaca desde la privilegiada posición de nuestro hostal en la Isla del Sol y vamos haciendo el duro ejercicio de despedirnos de aquel lugar mágico, saboreando esos últimos momentos antes de coger nuestra mochila y empezar el largo descenso hasta el puerto de Yumani.
Allí compramos nuestros tickets (aquí no los venden por adelantado) y esperamos unos minutos hasta que aparece nuestro barco de vuelta a Copacabana.
En Copacabana tenemos tiempo de comer y dirigirnos hacia el punto de encuentro desde dónde salía nuestro autobús a La Paz. Nos esperaban 3 horas y media de camino de vuelta a la gran ciudad, dónde haríamos noche para coger el temprano vuelo del día siguiente a Sucre y seguir nuestro itinerario de viaje en Bolivia.
Día 8 – La Paz – Sucre, nuestro viaje llegaba a la capital de Bolivia
Nuestro vuelo sale con retraso, pero a media mañana ya estamos en Sucre, la capital del Bolivia y después de dejar las mochilas en nuestro alojamiento para los próximos dos días, salimos a conocer la ciudad, una de las más bonitas del país.

Caminamos entre bonitos edificios coloniales, cruzamos la Plaza 25 de mayo, centro neurálgico de la ciudad y nos empapamos de la historia del país en la Casa de la Libertad. Sucre es una ciudad con patrimonio enorme y nos absorve al instante.
El día lo acabamos admirando la caída del sol desde el mirador de la Recoleta, uno de los lugares más especiales que ver en Sucre.
¡Info! Puedes leer mis artículo con ‘los mejores lugares que ver en Sucre‘ y mi ‘Guía práctica y consejos para viajar a Sucre‘
Día 9 – Sucre
Un día completo en Sucre da para mucho y lo aprovechamos para conocer todos los rincones que nos habían quedado pendientes el primer día. Desde la Universidad Francisco Xavier y su famosa arcada que aparece en los billetes de 100 bolivianos hasta su enigmático callejón de Santa Teresa y un montón de templos religiosos.
La ciudad no es demasiado grande y ya habíamos previsto en el momento de organizar nuestra ruta por Bolivia que nos sobraría algo de tiempo, así que aprovechamos para tomarnos el día con calma y tomar unas cervezas en un local al lado de la Catedral, que tenía happy hour. ¡Nunca nos olvidamos que estamos de vacaciones y estos momentos son necesarios! ¡Nuestra ruta en Bolivia se tomaba un respiro en forma de tarde de cerveceo!
Día 10 – Sucre – Potosí
Salimos temprano por la mañana hacia la Terminal de Buses de Sucre y compramos un billete hacia Potosí, que está a unas tres horas de distancia.
El autobús, bastante destartalado e incómodo, nos deja en la terminal de buses de Potosí casi una hora más tarde de lo previsto y de allí tomamos un taxi hasta el centro de la ciudad, dónde se encuentra nuestro hostal.

Inmediatamente después de llegar, salimos a patear la ciudad porque habíamos previsto muy poco tiempo en Potosí y a posteriori, pensamos que fue uno de los aciertos del viaje. La ciudad tiene cierto interés a nivel histórico y cultural, pero nos pareció descuidada, con mucho menos encanto que Sucre y con muchos menos lugares interesantes que en la capital boliviana. Si tienes pensado viajar a Bolivia por libre, puede que esta sea una de las paradas que puedas eludir en tu itinerario. No es que sea un problemón, pero si los días son limitados, puedes valorarlo.
Aún así conocemos lugares con encanto como la céntrica plaza 10 de noviembre y sus vistosas arcadas, la apartada iglesia de San Benito o el bonito convento de Santa Teresa y su mirador. Sin olvidarme de las vistas siempre presentes del imponente Cerro Rico.
¡Info! Lee mi post con los mejores sitios que ver en Potosí.
Día 11 – Potosí – Uyuni
Nuestro autobús, para el que compramos el ticket la mañana antes al llegar Potosí porque nos dijeron que suele ser un trayecto que se llena bastante, sale a las 12 del mediodía así que aprovechamos para hacer las últimas visitas en Potosí y nos dirigimos a la Terminal Interprovincial de Buses.
Allí, nada más llegar nos informan que nuestro autobús va a tener que dar un rodeo por unas manifestaciones populares que han cortado la carretera que une Potosí con Uyuni y en lugar de las 3,5 horas previstas, el trayecto durará 7 horas y para más inri, como es más largo, debíamos pagar la diferencia de precio. Sí, los buses miden su tarifa por el tiempo de trayecto; si es más largo, pagas más.
Cómo no nos queda alternativa, nos subimos al autobús y armados de paciencia disfrutamos de las vistas hasta Uyuni, dónde llegamos de noche para dormir en el Hotel Casa de Sal, uno de esos originales hoteles hechos completamente de sal que hay en esta zona y que vale la pena probar. Y como siempre somos positivos, hay que pensar que, al menos, el contratiempo no había alterado ni afectado negativamente a nuestro ruta de viaje en Bolivia.
¡Info!
Cuidado, si vienes de Sucre, el autobús te dejará en la Nueva Terminal de Buses de Potosí y los buses para ir a Uyuni salen todos desde la Terminal Interprovincial y Turística de Potosí, conocida también como Ex Terminal. Si como nosotros, quieres comprar tu ticket para Uyuni con anterioridad, tenlo en cuenta porque son terminales diferentes y además, alejadas entre si.
Nosotros, al llegar a Potosí tomamos un taxi desde la Nueva Terminal hasta el centro y le dijimos que parase en la Terminal Interprovincial para comprar nuestros tickets para el día siguiente. El conductor no nos puso ningún inconveniente porque, aunque estén alejadas, les coge de camino al centro.
Día 12 – Uyuni – Inicio tour Salar de Uyuni, el momento más esperado de nuestro viaje a Bolivia por libre
¡Hoy es un gran día! Nos despertamos con los nervios de unos primerizos y es que, hoy por fin empezaba nuestro tour por el Salar de Uyuni que, durante 3 días y 2 noches nos iba a llevar a conocer el Salar, las lagunas del altiplano o la Reserva de Fauna Andina Eduardo Avaroa.
Nuestro todoterreno viene con algo de retraso, pero nos subimos entusiasmados. ¡Daba comienzo esta pequeña aventura!
Sin entrar en demasiados detalles pues el tour es algo estandarizado y cualquier viaje a Bolivia por libre (u organizado) debe incluir una visita obligada al Salar de Uyuni, el primer día conocemos el famoso Cementerio de Trenes, la pequeña localidad de Colchani y sobre todo, el plato fuerte y en el que pasamos casi todo el día; el Salar de Uyuni. Todo el tiempo que paséis aquí os va a parecer poco.

Día 13 – Tour Salar de Uyuni
El segundo día de nuestro tour por el Salar de Uyuni nos lleva a descubrir lugares como el volcán activo Ollagüe (5.865 msnm) pero, sobre todo, las lagunas Cañapa, Hedionda, Honda o Chiarcota, en las que los flamencos, los colores y las montañas de fondo dibujan paisajes que parecen pintados.
El Desierto de Siloli y sus zorros del desierto, los árboles de piedra o la inmensa Laguna Colorada dan color a una jornada descomunal.
Día 14 – Tour Salar de Uyuni – San Pedro de Atacama
El último día de nuestro tour nos hace madrugar a las 4 de la mañana para asistir al descomunal espectáculo de los Geisers Sol de Mañana, a 4.965 msnm. Fue un momento único que culminó de la mejor de las maneras, con un baño en las Termas de Polques, dónde nos dimos un baño pese a los -5 ºC que caían encima.

El curioso desierto Salvador Dalí, las lagunas Blanca y Verde o el mirador del volcán Licancabur (5.930 msnm) dieron por concluida una jornada que nos dejaba en la frontera chilena para tomar el autobús que nos llevaría hasta una nueva meta en nuestro de viaje por Bolivia por libre y que esta vez se internaba en Chile: la cercana población de San Pedro de Atacama.
¡Info! Lee mi ‘Guía, consejos y faqs para orgainizar tu visita al Salar de Uyuni‘
Día 15 – San Pedro de Atacama
Chile es tan increíblemente caro que concentramos al máximo nuestras actividades para estar lo menos posible en San Pedro de Atacama. Sí, el presupuesto puede reventar aquí.
El primer día fue una toma de contacto y caminamos por sus polvorientas calles llenas de turistas. Aunque en Bolivia también hay turismo (sobre todo en el Salar de Uyuni), el paisaje había cambiado en todos los aspectos y aquí todos nos concentrábamos en una diminuta población que además, exprimía al máximo a quienes la visitaban.

Mañana: Hacemos una visita a los Géiseres del Tatio, un lugar único y espectacular en el que pasamos más frío del que habíamos pasado jamás. Los -10 ºC y la falta de ropa adecuada (aunque llevábamos mil capas) no ayudaron, aunque el sitio es del todo imprescindible si viajas a San Pedro de Atacama.
Tarde: Tour Valle de la Luna. Y si por la mañana habíamos tiritado de frío, por la tarde nos vamos al desierto a sudar la gota gorda. Las vistas aquí son escandalosas, otro de esos lugares que no debes obviar si tu viaje incluye una parada en el norte de Chile.
En este artículo, por cierto, puerdes leer las que, para mí, fueron las mejores excursiones en San Pedro de Atacama.
¡Info! Si quieres conocer todos los detalles de nuestros gastos durante el viaje, puedes leer mi post con el ‘Presupuesto de nuestro viaje a Bolivia por libre (más norte de Chile)‘.
Día 17 – San Pedro de Atacama
Dedicamos la jornada a visitar las Lagunas Altiplánicas, para nosotros la más floja de las tres salidas con diferencia. Son bonitas, pero si tu ruta de viaje ha pasado previamente por Bolivia y vienes de conocer las lagunas bolivianas, estas no van a ser ninguna novedad.

Como el tour acababa al mediodía, comimos en San Pedro de Atacama y dedicamos la tarde a pasear tranquilamente y relajarnos. Nuestro vuelo e vuelta a La Paz salía a la buenísima hora de las 3:20 de la madrugada y habíamos decidido no pagar hotel para esa noche así que, después de cenar solo nos quedaba hacer tiempo y eso nos lo solucionaron los majísimos propietarios del Hostal Belén Expediciones en el que habíamos estado esos días. Nos dejaron la habitación hasta tarde y nos dieron todas las facilidades por nada. ¡Mil gracias!
Día 18 – San Pedro de Atacama – La Paz – Coroico
Habíamos llegado a La Paz a las 8:30 de la mañana y desde el aeropuerto, cogimos un taxi directamente a la Terminal de Buses de Minasa para tomar un autobús a Coroico, una de esas paradas que casi improvisamos en nuestra ruta.
No sabíamos lo que nos íbamos a encontrar, pero la verdad es que hay decenas de buses, minibuses y minivans esperando a llenarse para salir hacia Coroico así que, llegamos, compramos un billete en un minibús que vimos bastante lleno y cuándo este completó su aforo, salimos rapidísimos hasta Coroico. ¡Había salido mejor que si lo hubiésemos calculado!

En dos horas llegamos a la pequeña localidad de Coroico y nos recibe un ejército de loros que sobrevuelan el pueblo y nuestro hotel, el coqueto Hotel Bella Vista, como puedes imaginar, con muy buenas vistas sobre el valle de Coroico.
Salimos a comer y nos encontramos a los amigos franceses que conocimos en el Salar de Uyuni así que compartimos comida y una buena charla. La verdad es que Coroico es un lugar tranquilo que nos venía de lujo para acabar nuestro de viaje en Bolivia por libre porque, además, el paisaje, verde y selvático, es completamente diferente a lo que habíamos estado viendo todos estos días atrás.
En el artículo que escribí sobre esta ciudad, podéis leer los mejores planes que podréis hacer en Coroico.
Día 19 – Coroico
Y para no haber mucho que hacer, os aseguro que aprovechamos este día al máximo. Por la mañana fuimos a ver las tres cascadas de Coroico, nada especial si os tengo que ser sinceros, y aprovechamos para hacer un pequeño trekking por las montañas que nos hizo sudar de lo lindo. No nos cruzamos absolutamente con nadie en las más de tres horas que caminamos.

Antes de comer, cogemos un colectivo que nos lleva hasta La Senda Verde, el motivo por el que habíamos llegado a Coroico. Este refugio de fauna andina que ha sido rescatada del tráfico ilegal y otras barbaridades, está a muy poco de la localidad y teníamos allí a un conocido haciendo un voluntariado así que, no dudamos en pasar una buena tarde conociendo algunos animales increíbles y muchas historias tristes.
¡Info! ¿Planeando tu viaje? Lee mi artículo con los imprescindibles que ver en Bolivia.
Día 20 – Coroico – La Paz, punto final de nuestro viaje en Bolivia por libre
Era el momento de abandonar Coroico y poner fin a nuestro itinerario de viaje por Bolivia y Chile. Esa misma noche teníamos nuestro vuelo de vuelta a casa desde La Paz así que tomamos un colectivo en la Terminal de Buses de Coroico y hacemos el camino inverso hacia La Paz, dónde pasamos las últimas horas de viaje paseando por su Mercado de las Brujas y haciendo algunas compras (ya sabéis, los recuerdos…) antes de salir hacia el aeropuerto, donde nuestro vuelo esperaba para devolvernos a Barcelona.