Qué ver en Namibia – ¡15 visitas imprescindibles!

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Última actualización: 11 octubre, 2022

Desiertos infinitos, fauna salvaje por doquier y unos paisajes que quitan el aliento, la lista de lugares que ver en Namibia dejan al descubierto una joya en el sur de África, que tuvimos el privilegio de conocer en un viaje de varias semanas por este inmenso país africano.

Qué ver en Namibia – 15 visitas imprescindibles en la joya del desierto

Los paisajes desérticos son la tónica general en este inmenso país que, a su vez, es uno de los menos poblados del planeta. Sin embargo, recorrer Namibia a bordo de un todoterreno es una aventura que permite conocer paisajes en un entorno único y salvaje; un país tan inhóspito como bello.

CONSEJO: En un viaje a Namibia es muy importante llevar un buen seguro de viaje, ya que vas a conducir durante muchas horas e incluso vivir alguna situación límite. Nosotros mismos tuvimos un accidente que podría haber sido mucho peor si hubiésemos viajado sin seguro.

Parque Nacional Etosha

Este gigantesco parque es uno de los más populares de África y ofrece infinidad de posibilidades. De hecho, nosotros estuvimos varios día de safari en el Parque Nacional Etosha y todavía pensamos que fueron pocos.

león joven en Etosha
La fauna de Etosha es una de las cosas más increíbles que ver en Namibia

Entrando por Anderson Gate (en la parte sur de la reserva), vale la pena pasar almenos dos o tres noches, una en cada campamento: sur, centro y norte o lo que es lo mismo Okaukuejo, Halali y Namutoni, y disfrutar relajadamente de su infinita fauna e intentar ver a los famosos Big Five.

En la charca de Okaukuejo es fácil ver rinocerontes blancos durante la noche y con bastante frecuencia aparece también alguno de los grandes depredadores, aunque eso sí, conviene reservar con algo de antelación aunque sea una parcela para acampar ya que debido a la fama de su charca, las instalaciones suelen llenarse con facilidad.

Elefantes en Etosha

En la charca del campamento de Halali es posible ver leopardos bien entrada la noche y en las cercanías del campamento, en la charca Salvadora se ven con frecuencia leones e incluso guepardos, mientras que en el campamento de Namutoni, al norte del parque y cerca de la salida que te conducirá hasta Tsumeb, se suele ver menos fauna, aunque siempre estarán presentes los habituales elefantes, jirafas y multitud de antílopes.

Más allá de estas experiencias singulares, recorrer los caminos polvorientos de Etosha es emocionante y puedes pasar horas al volante sin darte cuenta, aunque también puedes contratar un safari guiado en Etosha para no estar pendiente de la conducción e ir con un guía profesional, lo que siempre aumenta las posibilidades de avistamientos.

Sin duda, esta fue una de las grandes estrellas entre todo lo que había que ver en Namibia y disfrutamos cada momento como si fuese el último. Puedes ver su página oficial aquí.

¡INFO! Descubre algunos de los safaris más impresionantes que hemos hecho por el continente africano:
Safari en el Parque Nacional de Murchison Falls, una ruta entre cascadas y leones en Uganda.
Parque Nacional Hlane, la casa de los rinocerontes en Esuatini
Safari en el Parque Nacional Kruger, la joya de Sudáfrica
Parque Nacional Chobe, un safari entre elefantes en Botswana

Opuwo, la ciudad himba de Namibia

Opuwo es la última localidad civilizada al norte del país y en la que conviven miembros de las tribus himba y herero en un pueblo que es imposible que no resulte peculiar a los occidentales y es que estando tan al norte, no es habitual en los circuitos de las agencias que trabajan en África.

Pero una de las ventajas de viajar por libre es precisamente esa, que puedes ir donde quieras. Y nosotros, en nuestro viaje por libre a Namibia queríamos llegar hasta Opuwo para visitar esta peculiar localidad y llegar hasta la frontera con Angola.

Mujer himba en Opuwo Namibia

Esa ubicación remota y singularidad de sus tribus, convierten a Opuwo en un lugar extraordinario para empaparte de la cultura namibia y toparte con situaciones tan fuera de lo común para nosotros como hacer cola en el supermercado detrás de una mujer himba (que llevan la parte superior del cuerpo descubierta).

Por el camino también puedes visitar algún poblado himba, aunque cuidado con esto porque si vas con algún tour organizado suelen tener muy vistos a los turistas y no es tan auténtico. Nosotros tuvimos la suerte de conocer el día antes a un chico que necesitaba subir hasta Opuwo y le ofrecimos nuestro coche, a lo que accedió y como compensación, por el camino nos mostró un poblado que conocía.

Hay varios sitios para dormir, pero recomiendo el Opuwo Country Lodge, con bonitas cabañas y también sitio para acampar a buen precio. Las vistas son una maravilla desde aquí, especialmente desde la piscina. Además, Opuwo sirve como campo base para visitar las Cataratas Epupa, de las que hablaré más adelante.

Epupa Falls, las cascadas más espectaculares que ver en Namibia

Al norte del país, justo como frontera natural con Angola, el río Kunene avanza hasta llegar a una inmensa grieta en la tiene lugar un descomunal salto de agua que forma una especie oasis que te abruma nada más pisarlo; son las cataratas Epupa, una de las maravillas naturales más desconocidas que ver en Namibia.

Las Epupa Falls son extraordinarias y probablemente, se trata de las cascadas más espectaculares de Namibia, aunque pasan prácticamente inadvertidas para la mayoría de viajeros debido a su remota ubicación.

Mirando a las Cataratas Epupa

El último pueblo por el que pasarás antes de encarar un largo tramo de pista que te llevará hasta las cataratas es Opuwo y es importante repostar gasolina allí ya que no encontrarás otra oportunidad en los casi 400 km que tendrás que recorrer entre ida y vuelta. La pista no está en mal estado pero hay algunos tramos en los que hay que moderar la velocidad para salvar algunos puentes algo estrechos.

Aunque yo no lo hice, ya que dormimos en Opuwo, puedes pasar la noche en el Epupa Camp, a pie de las cascadas, en un enclave maravilloso y con un buen bar para tomar unas cervezas y cenar algo sencillo con unas vistas sublimes.

Desierto del Namib (PN Namib-Naukluft)

Este descomunal paraje es el desierto más antiguo del mundo y posiblemente uno de los más espectaculares del planeta.

El Namib es una alfombra de arena roja con dunas monumentales como la Duna 45, una de las más famosas con sus casi 200 metros de altura y que podrás ascender para deleitarte con sus vistas. Ver el amanecer desde lo alto de esta duna (o cualquier otra) es uno de los momentazos de cualquier viaje a Namibia.

A unos kilómetros de distancia se encuentra Dead Vlei, un acuífero seco de arena blanca y acacias deshidratadas que choca de lleno con el paisaje. Una imagen que parece más un espejismo y que se ha erigido desde un tiempo atrás en uno de los iconos de Namibia.

Deadvlei en el desierto de Namib

A parte de las atracciones que ofrece el desierto de Namib, lo mejor que puedes hacer es coger el coche y conducir por las pistas indicadas, probando tu astucia al volante y viviendo el desierto al máximo hasta que caiga el sol.

Lo mejor es alquilar una parcela para dormir en el campamento de Sesriem (gestionado por el gobierno) o en cualquier alojamiento cercano a la entrada al desiertoacampar bajo las estrellas y disfrutar del silencio del Namib. Bueno, y de su frío durante las noches de invierno austral, que no es poco.

Si no te atreves a conducir, que es bastante normal porque conducir por dunas y pistas arenosas no es sencillo, lo mejor es hacer una excursión al desierto del Namib en la que un conductor te libere de este problema (hay algunas, como la que te dejo justo debajo, que ya incluyen incluso el alojamiento y comidas de varias noches) y te enseñe los rincones más recónditos de uno de los desiertos más extremos del planeta.

Cañón de Sesriem

A pocos kilómetros del desierto de Namib aparece el Cañón de Sesriem, una enorme brecha de un kilómetro de longitud y más de 30 metros de profundidad que se fue creando de manera natural por la erosión producida por el río Tsauchab.

Recorrer este cañón es una actividad fascinante e ideal tras una mañana en las dunas del desierto, ya que además es posible ver algunos de los habitantes más pequeños de Namibia; pequeños insectos y reptiles suelen hacer acto de presencia entre estas paredes, uno de los pocos sitios del país donde hay agua todo el año.

cañon sesriem
El cañon de Sesriem es uno de los lugares más sorprendentes de Namibia

No tiene la grandeza del Cañón del Río Fish (del que os hablaré más adelante), pero es precisamente su tamaño el que te permite conocerlo a fondo y descubrir uno de los lugares más bonitos que ver en Namibia.

Solitaire y su famosa tarta de manzana

Para quienes vayan o vuelvan del desierto del Namib, la curiosa Solitaire es una de las paradas ineludibles.

Aquí se encuentra la gasolinera en la que todos paramos antes de internarnos en el desierto y no es solo para llenar el depósito, ya que su tarta de manzana se hecho mundialmente famosa.

solitaire
Las polvorientas chatarras de coches son el signo distintivo de Solitaire

Aparca, pon gasolina y dirígete hasta la cafetería para pedir un apfelstrudel, el pastel de manzana más famoso de Namibia. Cuándo lo pruebes, verás por qué se ha hecho tan famosa. ¡Está deliciosa!

Hay poco más aquí a parte de algunos coches destrozados y polvo, pero por este remoto lugar han pasado personalidades de todo tipo (incluidos algunos tan famosos como Brad Pitt) que se han hecho eco, no vayas a ser tú menos.

Spitzkoppe, la montaña más espectacular que ver en Namibia

El Spitzkoppe es un enorme pico de granito que sobresale en un paisaje llano y desértico, una maravilla natural que, de nuevo, muchos viajeros pasan por alto, pero que para mí fue una de las que más merecieron la pena visitar.

Este macizo de granito de 700 millones de años de antigüedad se alza imponente casi 2.000 metros sobre la sabana namibia, en la región de Damaraland.

Spitzkoppe Namibia

Además del impacto visual, el Spitzkoppe fue un antiguo santuario para los bosquimanos, que dejaron aquí sus huellas en forma de pinturas rupestres.

La mejor manera de visitarlo es desde Swakopmund y es posible hacerlo en una excursión de un día (por tu cuenta o de manera organizada), aunque también se puede acampar tramitando un permiso previo.

No dudo de la espectacularidad de la acampada a los pies de esta descomunal roca, aunque con simplemente disfrutar de una comida a los pies de este gigante ya te sentirás un auténtico privilegiado.

Winhoek, una capital entre el pasado y el presente

La capital de Namibia es una urbe con tintes cosmopolitas, pero con la enorme personalidad que caracteriza a las grandes ciudades africanas.

La influencia colonial alemana queda patente en cada rincón, con la pintoresca Christuskirche como uno de los grandes atractivos en este aspecto, así como el antiguo fuerte (Alte Feste), los dos edificios con mayor relevancia histórica, aunque no los únicos.

Windhoek
La capital de Namibia es una de las paradas que te va a tocar hacer obligatoriamente

Dejando a un lado el legado colonial, las amplias avenidas se han llenado de enorme edificios que forman un skyline que ya empieza a ser la tónica en las capitales del continente y un tráfico intenso en la que suele ser la primera toma de contacto con Namibia.

También hay varios restaurantes interesantes como el clásico Joe’s Beerhouse, o algunos cafés con vistas a la ciudad en los que bajar el ritmo durante un rato.

Windhoek es el punto de partida de todo viaje, el sitio perfecto para comprar provisiones de cara a la aventura que se avecina y también el colofón, donde despedirse del que seguro habrá sido un viaje memorable y de un todoterreno que habrá sido tu casa durante varias semanas.

La Costa de los Esqueletos

La Costa de los Esqueletos es uno de los lugares que más llama la atención cuando empiezar a preparar el viaje y sin duda, es uno de esos sitios que resultan tremendamente peculiares.

Es uno de los últimos parajes vírgenes más grandes del mundo cuyo mediático nombre te atrae hasta esta costa de más de 2.000 km famosa por los fenómenos que provoca la corriente de Bengela y como consecuencia, los naufragios que históricamente se han producido en sus aguas. Pero no es solo eso, sino que además al ser una costa tan inhóspita no es difícil toparse con el cuerpo de algún animal salvaje que, desorientado, se ha internado sin suerte en esta zona de extrema dureza.

Costa de los Esqueletos Namibia

Los permisos de entrada son algo estrictos si te quieres alojar en el interior de la zona protegida (Torra Bay o Terrace Bay) y tienen horarios restrictivos para evitar problemas, ya que no encontrarás absolutamente ningún servicio durante horas de conducción.

Si como nosotros, lo que quieres es simplemente cruzar la Costa de los Esqueletos, hay que estar en la puerta de entrada al Parque Nacional antes de las 13h (no aceptan entradas más tarde de esa hora) y salir antes de las 15h, conducir un tramo de 200 km hasta la primera salida y descubrir algunos de los cuerpos de esos barcos que naufragaron o simplemente dejarte embaucar por sus impresionantes paisajes.

Yo la crucé en un trayecto que, desde Swakopmund te lleva hacia el norte, entrando por la puerta sur y saliendo justo antes de Torra Bay en una carretera que se interna rumbo este que te deja encarado bien para ir al norte del país (dirección Opuwo) o bien para visitar el Parque Nacional Etosha.

Cape Cross, la gran colonia de leones marinos que se puede ver en Namibia

Ubicada al norte de Swakopmund, la reserva de Cape Cross es uno de los lugares más espectaculares que ver en Namibia y esta vez sí, es una parada habitual, tanto en cualquier viaje por libre como organizado.

Nosotros dejamos atrás Swakopmund (habitual base para llegar hasta este punto) y tras un buen rato de conducción, llegamos por fin hasta la entrada de Cape Cross, donde lo primero que notarás será un intenso olor.

Centenares de lobos marinos frente a la orilla del mar

Este tramo de costa de Namibia ha sido invadido por completo por los leones marinos, que se cuentan por miles en una escena indescriptible y que han formado una de las mayores colonias del mundo. Nos dicen que en época alta puede haber aquí hasta 250.000 ejemplares, una cifra que nos tira para atrás como el propio hedor que se percibe desde mucho antes.

Una vez dentro de la zona protegida, miles de leones marinos de todos los tamaños, incluidas monísimas crías, hacen su vida, se mueven y se comunican con divertidos sonidos. Podríamos haber estado allí horas observando detenidamente infinidad de escenas.

Ten en cuenta que el horario para visitar Cape Cross es de 10 am a 5 pm y cuesta N$ 40 más N$ 10 por el vehículo o también puedes llegar con una de las visitas guiadas que parten cada día desde Swakopmund.

Franja de Caprivi

Puede que no esté en las listas habituales de lugares que hay que ver en Namibia, pero yo siempre la recomiendo porque atravesar esta alargada franja fronteriza es una de las experiencias más auténticas que vivimos durante el viaje.

Esta franja de casi 500 km. de longitud trazada sobre papel con una regla para que el país tuviese acceso al río Zambeze es hoy una de las regiones más pobres del país.

Carretera de Namibia
Muchas de las carreteras que vas a ver en Namibia son como esta

La carretera que la atraviesa (la B8) llega hasta su ciudad más importante, Katima Mulilo y de ahí hasta la frontera con Botswana en Ngoma, que en nuestro caso era la que nos interesaba, pues nos trasladábamos hasta este país para descubrir todos los lugares increíbles que ver en Botswana.

Atravesar esta recta de medio millar de kilómetros es meterte de lleno en la realidad de Namibia, en su soledad y en su pobreza, con personas que caminan por el lateral de la carretera durante horas hasta el siguiente poblado o niños que salen de la escuela y marchan hacia casa.

Puede que pienses que hacer 500 km en línea recta te vaya a resultar aburrido y por momentos será así, pero cruzar la Franja de Caprivi es una experiencia que te enseña la realidad más cruda y menos bonita de Namibia. Eso sí, no olvides llevar las reservas de combustible bien llenas por qué no encontrarás sitio donde repostar en todo el camino.

Mahango Game Reserve, una de las reservas de fauna alternativas que ver en Namibia

Cerca del inicio de la Franja de Caprivi viniendo desde Namibia, la pequeña reserva de Mahango es un buen lugar para observar fauna de una manera tranquila y casi en soledad, aunque en los últimos tiempos se ha popularizado algo más.

No tiene nada que ver con el gigantesco Parque Nacional Etosha y no será sencillo ver alguno de los grandes depredadores, pero a cambio tendrás la oportunidad de ver a algunos de los animales más grandes (búfalos, elefantes, hipopótamos…) a distancias francamente cercanas y en un entorno fabuloso.

Puesta de sol en carretera Mahango Game Reserve

Esta reserva además, es una de las pocas de Namibia que permite salir del coche, aunque la sensación de vulnerabilidad te hará volver rápidamente a tu vehículo.

Se puede dormir en el cercano Ngepi Camp, ya sea acampando o en una de sus cabañas en los árboles frente al río Okavango mientras escuchas a los hipopótamos por la noche, en lo que será una gran experiencia.

Fish River Canyon

Es el segundo cañón más grande del mundo tras el Gran Cañón y al igual que con su hermano mayor americano, aquí podrás disfrutar de algunos miradores cuyas vistas son un auténtico espectáculo, con barrancos de hasta 550 metros de profundidad y rutas increíbles.

Cañón del río Fish Namibia

El Fish River Canyon es uno de los lugares más espectaculares que ver en Namibia, aunque a nosotros nos faltó algo de tiempo para explorarlo mejor, por lo que tenemos ahí una cuenta pendiente con este destino.

Se puede acceder por las entradas de Hobas (al norte) y de Ai-Ais (al sur) y hacer noche en alguno de sus campamentos. Por supuesto, también hay rutas de trekking guiadas para los más aventureros, en las que deberás llevar todo lo necesario contigo y dormir en acampada libre, aunque para eso necesitarás pasar varios días en el cañón. ¿Te atreves?

Rundu, la segunda ciudad de Namibia

La segunda ciudad más poblada de Namibia (con poco más de 40.000 habitantes) es un punto ideal para hacer una parada técnica para repostar y comprar algo de comida antes de adentrarte en la Franja de Caprivi, donde te será difícil encontrar nada hasta el final de la misma, unos 500 km más adelante.

Cabaña n'Kwazi lodge en Rundu

La ciudad en sí no es más que el único centro comercial de la región y principalmente destacan sus mercados, su gente y una frenética actividad en cada rincón.

Además, Rundu puede servir para hacer noche y coger fuerzas antes del largo tramo de coche que supone la franja de Caprivi, ya que a las afueras de la ciudad se encuentran algunos lodges con bonitas cabañas y vistas a la frontera con Angola, que se atisba a pocos metros de distancia, aunque con el río Okavango como obstáculo.

Swakopmund, el legado alemán más visible en Namibia

Fue en 1892 cuando los alemanes se establecieron en esta ciudad costera del oeste de Namibia y todavía hoy se aprecia perfectamente la huella que dejaron y que mantienen viva.

Swakopmund fue un importante puerto pesquero, aunque lo primero que llegó a este puerto fueron las casas construidas desde la misma Alemania. Parece que no se fiaban de construirlas aquí…

En la visita a esta ciudad destaca su arquitectura colonial, pero también su bonita costa y su carácter africano, que llena de vida algunas calles con sus mercados ambulantes, que contrastan enormemente con las numerosas tiendas de diamantes que puedes encontrar.

Swakopmund

Puedes alojarte en el The Mole Guesthouse, bien situado y muy amables con cualquier ayuda que necesites o también puedes hacer una visita guiada a la ciudad, la mejor manera de no perderte ninguno de sus rincones e historias, que no son pocos.

Para quienes llegan aquí, es la base ideal para visitar lugares como el Siptzkoppe, Cape Cross o incluso el Desierto de Namib, pero también para relajarse y disfrutar de un buen restaurante y una cerveza con vistas al mar.

7 comentarios en «Qué ver en Namibia – ¡15 visitas imprescindibles!»

  1. Gran viaje!! Después de leer por todos los artículos y sitios que visitar y me he decido a hacer este viaje en verano.

    Gracias por compartir tus experiencias

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  2. … Gracias Tomas, te hago una consulta, en caso de que no llegues a poder quedarte dentro de algún camping o no llegues a un pueblo o ciudad, te puedes quedar con el jeep donde quieras?? o incluso si llegas a alguna ciudad y no tienes donde quedarte, a las fuera de la ciudad o preguntando te podrías quedar en ella??

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    • Hola Alejandro, en teoría la acampada libre no está permitida y nosotros no lo hicimos, por lo que no tengo claro que pasaría si la hicieseis. Igualmente, yo creo que si te organizas bien, puedes llegar perfectamente a todas partes y en las ciudades, además, los campings para acampar son muy baratos.

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  3. ¡Interesantísimo artículo! Vamos a hacer un viaje a Namibia en unos meses y planeamos visitar casi todos estos lugares. ¿Cuántos días recomiendas para un buen safari en Etosha? Gracias.

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    • ¡Hola Marta! Es un viaje espectacular, os encantará seguro. Sobre Etosha, yo recomiendo entre dos y tres días completos (pasar al menos dos noches en el interior). Con esto podréis ya hacer bastantes horas de safari y ver casi todo tipo de fauna. ¡Un saludo y disfruta de Namibia!

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