Aprovechando que habíamos contratado un coche privado para hacer nuestro viaje de Agra a Nueva Delhi por carretera (recuerda que puedes contratar tu transporte, público o privado con el buscador 12go Asia, muy útil en la India), decidimos aprovechar el día añadiendo alguna parada intermedia que nos permitiese conocer los lugares que había que ver en Mathura y Vrindavan, dos de las ciudades más sagradas en India.
La primera parada la realizamos en Mathura, a unos 50 km. al norte de Agra y uno de los lugares sagrados del hinduismo. ¿El motivo? Aquí nació el dios Krishna y pasó sus primeros años de vida, por lo que ya puedes imaginarte que todo lo que teníamos que ver en Mathura iba a estar íntimamente relacionado con él y con los famosos ghats (todo el mundo conoce los ghats de Varanasi), y esta idea nos parecía muy interesante.
Descubriendo el pasado de Mathura en el templo Krishna Janma Bhoomi Mandir
Lo primero que observamos al bajar de nuestro coche en Mathura fue que se trata de una ciudad extremadamente religiosa. Diría que totalmente volcada en esto. Se ven fieles por las calles que siguen el movimiento del Hare Krishna y que acuden aquí para venerar el lugar de nacimiento de su dios. Aunque es enero y estos no son tantos como en verano, cuando se celebra el Janmastami, el cumpleaños de Krishna, que según nos cuenta nuestro conductor, concentra en Mathura y Vrindavan (la localidad vecina) a miles de fieles.

Nuestros primeros pasos nos dirigen, entre callejones laberínticos, hacia el templo Krishna Janma Bhoomi Mandir, el lugar exacto en el que se cree que nació el dios Krishna y un punto clave de peregrinaje, pues este es uno de los lugares sagrados del hinduismo, pero con un pasado que deja en evidencia la complicada historia de Mathura y de la India.
Aquí, en el templo Krishna Janma Bhoomi Mandir, antes había templos budistas y es que, hasta el siglo VIII el budismo imperaba en la ciudad, pero el hinduismo empezó a hacerse un hueco.

Esto duró hasta que llegó el imperio mogol en el siglo XVI, que de la mano de Aurangzed destruyó el antiguo templo de Kaseva Deo y construyó una mezquita en ese espacio. Un espacio que consiguió ‘reconquistar’ el hinduismo y hacerlo suyo hasta el presente, aunque dejando un espacio reservado para el culto musulmán, en el que se ha construido la mezquita Katra Masjid.
Sabías que…? Krishna es un avatar del dios hinduista Visnú, ese de piel azul, uno de los dioses más venerados de India.
Este reparto del espacio ha causado algunas tensiones y por eso se puede observar mucha vigilancia en el entorno. Es bastante impactante la cantidad de militares armados que se ven en los alrededores. Que sí, que están con el objetivo de asegurar la buena convivencia, pero a veces resulta curioso el intento de lograr la paz mediante las armas.
Una vez en el interior del templo y ya descalzos, requisito obligatorio para entrar al complejo, esquivamos a los monos para llegar hasta la pequeña sala que indica el lugar en el que nació el dios Krisna hace más de 3.500 años, que cruzamos en fila de uno en mitad a una larga cola de fieles.

Acabamos nuestra visita al complejo de Krishna Janma Bhoomi Mandir entre multitud de gente, bastantes monos y ningún turista a la vista, algo que nos parece bastante curioso y de nuevo, despierta nuevas emociones en este viaje a la India.
¡Info! La entrada al templo Krishna Janma Bhoomi Mandir es gratuita, pero está prohibido entrar cámaras, móviles y cualquier tipo de mochila. Hay una taquilla en la entrada en la que puedes dejar tus cosas. No intentes colar nada porque se pasan varios controles de seguridad y cacheos bastante minuciosos.
Otros lugares interesantes que ver en Mathura
Y además de por ser el lugar de nacimiento de Krishna, a Mathura, principalmente por sus ghats, también se la conoce como la pequeña Varanasi, en la que se pueden ver los ritos hindúes a más pequeña escala en el sagrado río Yamuna, el principal afluente del Ganges.
De nuevo caminamos entre callejuelas con el objetivo de ver el movimiento cercano al río y llegamos al Vishram Ghat, el ghat más importante que ver en Mathura y que tiene movimiento a todas horas, aunque este no es el mejor momento ya que, es al atardecer cuando más gente acude aquí a realizar sus ritos.

Aquí, en el Vishram Ghat, la leyenda dice que fue donde el dios Krishna descansó tras matar al rey Kansa.
Aunque nosotros no lo hicimos, es un buen lugar para realizar paseos en barca por el río Yamuna y ver el movimiento de Mathura y sus ghats desde otra perspectiva. Nos los ofrecieron muy baratos, por lo que el precio no debería ser un inconveniente y si nosotros no lo hicimos fue por falta de tiempo.

Y aunque seguro que hay muchos más lugares interesantes que ver en Mathura, pues la ciudad esconde rincones sorprendentes y auténticas a cada paso, nosotros nos dirigimos directamente, de nuevo atravesando estrechas calles, hacia lo que se conoce como el Chowk Bazar, un frenesí de tiendas, vendedores ambulantes de comida y por supuesto, gente, mucha gente y vacas, muchas vacas. Se podría decir que en esta parte de Mathura, además de en sus ghats, es en la que se vive la esencia de una ciudad que respira religiosidad por todos los costados y de la que nos despedimos para seguir el peregrinaje que decenas de miles de hindús realizan en verano, coincidiendo con la celebración del Janmastami y que les lleva hasta Vrindavan, la ciudad en la que creció su dios y que sería nuestra siguiente parada. Allí descubriríamos que Mathura y Vrindavan están estrechamente ligadas y no se entiende la una sin la otra.
Sigue mi viaje a India leyendo mis artículos con los ‘lugares que ver en Nueva Delhi en un día‘ y nuestra experiencia de safari en el Parque Nacional Corbett, a los pies del Himalaya.
Hola, qué tal?
No he tenido la suerte de ir a la India pero por lo que me han comentado, y por la sensación que me da, visitar este país tiene que ser, ante todo, remover el espíritu de uno mismo.
Muy buen post, felicidades ????
¡¡Hola!! Es un viaje intenso, pero nada que no puead hacer cualquier, en mi opinión. Y Mathura es una ciudad pequeña pero donde el fervor por el hinduismo alcanza niveles muy altos, siendo uno de sus centros religiosos. Yo siempre había tenido dudas sobre el país, pero la verdad es que merece la pena y estoy deseando volver a conocer otras partes del país.
¡Un abrazo!