¿Se puede mezclar una visita cultural a una ciudad con una buena dosis de cerveza? Pues ahí que voy, con todas las ganas del mundo de conocer los sitios más interesantes que ver en Pilsen (Plzen en checo) y acabar la ruta con una visita a una de las fábricas de cerveza más importantes de la República Checa y del continente. Si te gusta el plan, esta es tu ciudad y, por descontado, este es tu artículo.
⭐ Durante mi visita a Pilsen estuve alojado en este hotel frente a la fábrica de cerveza Pilsner Urquell. Las vistas de la fábrica son geniales y el hotel está muy bien. El centro histórico está a cinco minutos caminando. ¡Muy recomendable!
Índice
Qué ver en Pilsen – 10 visitas imprescindibles
Entrando en materia y sin olvidarme de que su famosa fábrica de cerveza es uno de los lugares que más turistas lleva a la ciudad año tras año, hay algunos planes muy interesantes que hacer en Pilsen y por supuesto, otros atractivos de los que disfrutar en esta bonita ciudad de la Bohemia Occidental que, por cierto, es la cuarta más grande de la República Checa, por detrás de Praga, Brno y Ostrava.
ℹ️ Nosotros visitamos Praga en 4 días y desde allí hicimos algunas excursiones como esta, ¡un viaje que vale mucho la pena y que me permitió conocer muchos de lo mejores lugares que ver en República Checa!
Fábrica de cerveza Pilsner Urquell
No os puedo negar que, en realidad, lo que nos trajo hasta Pilsen fue su famosa fábrica de cerveza. Nos encanta el oro líquido y estando tan cerca de una de las cunas cerveceras, vale la pena la escapada.
Entrando al recinto, su arco de entrada te recibe y te da paso a una de las fábricas de cerveza más importantes del planeta. De hecho, aquí está la primera curiosidad, porque si te fijas, este arco es justamente el que aparece en muchas de sus botellas de cerveza.

Una vez aquí me imagino que es porque estás decidido a visitar la fábrica, así que es importante saber que ofrecen tours guiados por el interior cada día, cuya duración dos horas. Te aconsejo comprarlas con tiempo porque las entradas se agotan. (Aquí mismo puedes comprarla por adelantado con la cata de tres cervezas).
Si no has visitado nunca una fábrica de cerveza, vale mucho la pena ver precisamente esta, una de las más grandes de Europa y además, con la entrada entra la degustación de tres cervezas de la marca, que para empezar el día, no fueron mal en la cálida Pilsen.
Sabías que…? La cerveza Urquell nació en 1842 y fue la primera cerveza rubia de la historia. Es la madre de 2/3 de las cervezas del mundo.
En el recorrido por la fábrica se pueden ver varias salas por las que pasa la cerveza en su proceso de elaboración, así como pequeñas salas-museo, aunque lo más interesante llega en el subsuelo, cuando la visita llega a los túneles subterráneos en los que se almacenaba la cerveza y donde te dan a probar varias muestras.

Según nos explican en el tour, uno de los secretos de la cerveza Urquell es que sigue un proceso de triple fermentación, pero, sobre todo el agua que se utiliza para esta, que se toma de pozos cercanos de más de 100 metros de profundidad.
Desde su base en Pilsen, la fábrica Pilsner Urquell exporta cerveza a más de 50 países en el mundo y si te lo estás preguntando, la respuesta es sí, también la pueden encontrar en España.
Plaza de la República
La siguiente parada de este recorrido por los lugares más interesantes que ver en Pilsen -dejando a un lado la cerveza- es el centro neurálgico y gran atractivo de la ciudad: la Plaza de la República (en checo Náměstí Republiky).
Esta inmensa plaza, de forma cuadrangular y que un día llego a ser la más grande del continente, es hoy el gran centro de Pilsen y el punto ideal para empezar la ruta por la ciudad.
Alrededor de la plaza se encuentran varios edificios reseñables, como el Ayuntamiento, de estilo renacentista y que data del siglo XVI. Es uno de los edificios más antiguos de Pilsen, aunque te hablaré un poco más adelante sobre él.

Otro de los edificios más importantes y que salta a la vista es la Catedral de San Bartolomé, con la que luego entraré en mayor detalle y, por supuesto, sus fuentes doradas.
La plaza cuenta con tres fuentes doradas que se instalaron en 2010 para poner guapa la ciudad de cara a la capitalidad Europea de la Cultura que albergaría en 2015. Cada una de ellas representan las figuras del escudo de Pilsen: un ángel, un camello y un galgo. Las encontrarás en tres de las esquinas de la plaza. Y te preguntarás, ¿y la cuarta esquina? Allí se encuentra la columna de Plagian (o columna de la peste), un sencillo recuerdo de que Pilsen sobrevivió y acabó con la peste en el año 1681.

En la Plaza de la República tienen lugar multitud de eventos, desde exposiciones al aire libre hasta conciertos y por supuesto, mercados ambulantes, como el popular mercado de productos locales que se instala cada sábado.
Catedral de San Bartolomé
En mitad de la mencionada Plaza de la República, aparece el monumental edificio que es la Catedral de San Bartolomé, cuyos inicios datan del siglo XIV y en el que destaca, por encima de todo, su inmensa torre de 102 metros de altura, la más alta de toda la República Checa.

Si te gustan las vistas elevadas (a nosotros nos fascinan), se puede subir al mirador situado en la torre (a 53 metros de altura) y obtener las que posiblemente sean las mejores panorámicas que ver de Pilsen. La entrada cuesta unos 4 euros.
Un dato curioso sobre la Iglesia de San Bartolomé es que sus campanas fueron fundidas por los nazis y las que hoy se pueden ver en su campanario son muy recientes, de 2013 y con motivo de la declaración de Pilsen como capital de la cultura en el año 2015.
Gran Sinagoga de Pilsen
Casi todos los datos sobre la Gran Sinagoga de Pilsen impresionan con solo leerlos y uno se sorprende al encontrar semejante construcción en Pilsen, pero así es.
La Gran Sinagoga es la segunda más grande de Europa y la tercera más grande del mundo (solo por detrás de Jerusalén y Budapest), y tiene capacidad para más de 2.000 personas en su interior.
Dejando a un lado estos imponentes datos sobre su tamaño, lo que más me llamó la atención fue la curiosa mezcla de estilos en su arquitectura, pudiéndose diferenciar, de manera más o menos fácil y clara, estilos morisco, románico, neorrenacentista, ortodoxo ruso (observarás esto en sus bonitas cúpulas bulbosas), árabe e incluso indio.

Se construyó entre 1888 y 1892 gracias, en gran parte, a las donaciones de la inmensa comunidad judía que habitaba en Pilsen por aquel entonces.
Aunque todavía se utiliza como edificio religioso, la realidad es que no quedan muchos judíos en Pilsen y desde hace ya unos años, la Gran Sinagoga también se utiliza como sala de conciertos y exposiciones. No es mal sitio, desde luego.
La Gran Sinagoga es uno de los edificios más interesantes que podrás ver en Pilsen y se encuentra a solo unos pasos de la céntrica Plaza de la República, por lo que no tienes excusa.
Antiguo Ayuntamiento de Pilsen
Es una de las joyas del centro de la ciudad. Con su fachada renacentista del siglo XVI, su semblante elegante y su fachada repleta de detalles.
La planta baja es de acceso libre y allí está la Oficina de Turismo de Plzen, donde puedes pedir información para tu visita o para conocer los alrededores.
Como curiosidad, el edificio fue residencia imperial y en su interior puedes ver una maqueta de la ciudad.

Parque de Mlýnská Strouha, una reinvención ideal
En Pilsen también hay canales. Bueno, hay un canal en realidad y es artificial, pero es un rincón con encanto donde sentarse a descansar con una Pilsner Urquell entre las manos.

A unos pasos del centro, la ciudad se ha encargado de restaurar un antiguo canal que antaño servía para abastecer de agua a los molinos de la ciudad.
El resultado fue un pequeño parque urbano muy pintoresco con zonas verdes y un par de cafés. El ambiente es súper relajado y fue una de las sorpresas más bonitas de mi visita a Pilsen.

Museo de las marionetas
La tradición de las marionetas en Chequia está muy arraigada y en la ciudad puedes visitar un museo dedicado íntegramente a ellas. La verdad es que me pareció uno de los sitios más divertidos que ver en Pilsen y echamos unas buenas risas.
El motivo de este singular museo se debe a que Pilsen fue un centro importante del teatro de marionetas checo hasta el s. XIX. Multitud de artistas ambulantes llegaban a la región en busca de éxito representando sus obras.

El museo abrió sus puertas en 2009 y se encuentra en un bonito edificio renacentista en la Plaza de la República. En sus tres plantas puedes ver exposiciones de todo tipo. Algunas, por cierto, son interactivas y me parecieron muy divertidas. Puedes ver su página web para hacerte una idea.
No te pierdas las marionetas de los dos personajes más famosos de Pilsen, Spejbl y Hurvínek. ¡Estos dos iconos checos nacieron aquí y son motivo de orgullo nacional!
Túneles subterráneos de la antigua ciudad de Pilsen
Una de las cosas más curiosas que podréis ver en Pilsen son, sin duda, sus túneles subterráneos.
Se trata de un sistema de túneles y corredores por debajo del suelo de la ciudad que en ocasiones tienen incluso tres niveles y que llegaron a ser uno de los sistemas subterráneos más largos e importantes del Europa. De hecho, tal es su tamaño, que se dice que se fueron construyendo a lo largo de cinco siglos.
En la actualidad, tras varias restauraciones e intentos por recuperar una parte importante de lo que fueron más de 19 km. de túneles, todavía hay algunos que se conservan en buen estado y por suerte, es posible visitarlos.

Sus usos fueron varios, desde el más obvio, el de defensa y escondite, hasta otros como el almacenamiento de alimentos, que aquí se mantenían de maravilla. ¿Lo mejor de todo? Hoy todavía se utilizan algunos de estos túneles para almacenar cerveza.
Es curioso, porque recuerdan en muchos momentos a los túneles subterráneos que pudimos ver en San Juan de Acre, la bonita ciudad de Israel y que se encuentra muy alejada de aquí.
No te olvides de llevar una chaqueta, incluso en verano hace bastante fresco ahí abajo y la visita guiada dura más de una hora, para la que también te cederán un casco.
El tour, organizado por la oficina de turismo de Pilsen, puedes reservarlo aquí. Tiene un precio de 200 CZK y dura 60 minutos. El tour es en inglés, aunque hay una audioguía disponible en un montón de idiomas, incluido el español.
Cervecería Purkmistr: una experiencia cervecera completa
Si no has tenido bastante cerveza con la Pilnsner Urquell, ahí va otra propuesta con sabor a lúpulo. Aunque en este caso hay que ir hasta las afueras de Pilsen, al barrio de Černice, para conocer la cervecería artesanal Purkmistr.
En la Pivovar Purkmistr (así se conocen las cervecerías en Chequia) nos ofrecieron una cata de seis cervezas diferentes, desde la clásica lager hasta alguna tostada o de trigo. Todas son de elaboración propia mediante métodos tradicionales.

Después de la cata pudimos disfrutar de un spa de cerveza. Qué maravilla es relajarse en lúpulo bien calentito y tener tu propio tirador de cerveza. Si nunca lo has probado, te lo aconsejo al menos una vez y Chequia es el mejor destino para ello.
Como final de fiesta, cenamos en su restaurante. Es un sitio rústico con un ambiente acogedor donde sirven platos locales. Por supuestos acompañados con cerveza.
Si tienes tiempo yo combinaría la visita a la Pilsner Urquell con la de la Cervecería Purkmistr, porque ambas son interesantes y ofrecen experiencias totalmente distintas.
Otros lugares interesantes que ver en Pilsen
A estas alturas ya habrás visto que Pilsen me gustó bastante y es que, además de todos estos lugares que te he mencionado y que serían los más importantes, hay otros que también son bastante chulos.
Si tienes un rato en la ciudad, pasea por sus calles y busca la curiosa escultura de Spejbl y Hurvínek, los icónicos títeres creados en Pilsen. Te doy una pista: están en unos bonitos jardines cerca del ‘Teatrum Mundi’.

Otro lugar interesante es la Casa de la Cultura (Měšťanská beseda), un antiguo edificio modernista que hoy acoge, entre otras cosas, un encantador restaurante.
Por último, aprovecha que la ciudad es muy pequeña para hacer una pequeña ruta de noche. Me pareció especialmente bonita la Plaza de la República y la catedral, pero sobre todo el Parque de Mlýnská Strouha. Ambos lugares están muy bien iluminados y se ven muy bonitos cuando cae el sol.

Pese a ser una ciudad relativamente pequeña, Pilsen también alberga algunos museos interesantes.
El primero de ellos, no podía ser otro que el Museo de la Cerveza, en el que te explicarán la historia de su famosa cervecera y la de este fabuloso líquido en la ciudad. También puedes visitar el Museo de Western Bohemia, uno de los más grandes del país, con miles de objetos y con especial mención a su colección de armas.
Para acabar, también es posible visitar el Museo de la Ciencia, fundado por la compañía Skoda y del que puedes conocer más información en su página oficial.
Dónde comer en Pilsen: platos típicos y cerveza por doquier
Durante mi visita a Pilsen pude disfrutar de varios restaurantes tradicionales checos que también os voy a recomendar. Fue genial porque cada uno tenía gracia.
Además, comí muy bien en todos ellos y lo que no falta nunca es la cerveza. Por cierto, si sigues hasta el final del post, verás que vas a poder probar una cerveza muy especial en uno de ellos.
- Restaurante U Salzmannů: Ambiente checo, buena comida y platos inmensos. Por supuesto, todo acompañado de cerveza, aunque aquí también probé el vino checo, un proseco que bien frío deja muy buen sabor de boca. Comí el tradicional queso frito (smažený sýr) y probé los halušky (una especie de gnocchis súper típicos) con setas. ¡Delicioso todo!
- Cervecería Na Spilce: Se encuentra dentro de la fábrica Pilsner Urquell y aunque se respira un ambiente más relajado, también se come muy bien. Tiene muchos platos típicos (yo volví a tirar de gnocchis) y lo acompañan con cerveza de la fábrica. ¡Mola!

Prueba la cerveza sin filtrar del Na Parkanu
Probablemente fue la gran sorpresa gastronómica del viaje y por eso os lo recomiendo encarecidamente.
El ambiente es muy local, checo total, con grupos de amigos bebiendo cerveza sin cesar. Lo mejor es que según dicen, es el único sitio de Pilsen donde puedes beber la Pilsner Urquell sin filtrar. Está riquísima, os lo aseguro. Además, me sorprendió su carta porque además del típico queso frito o dumplings (knedlíky), tenían un plato con “carne” vegetal que me pareció un puntazo. Eso sí, era tan contundente que no me lo pude acabar.
Cómo llegar a Pilsen desde Praga
Aunque hay ciudades más cercanas, suele ser habitual visitar Pilsen desde Praga, por eso voy a intentar resumirte la mejor manera de llegar desde la capital checa.
La primera es hacerlo en coche. Puedes alquilar un coche y acercarte a la ciudad en un trayecto que dura una hora escasa, aunque seguramente, si te alojas en la capital, pases de alquilar coche y prefieras valorar las opciones de transporte público.

Llegar a Pilsen en autobús
La compañía Student Agency Bus cubre el trayecto, que dura 1 hora. La frecuencia de salidas es alta, casi cada hora hay un autobús que sale desde la estación de autobuses Zličín de Praga. De manera resumida:
- Duración: 1 hora
- Precio: 4 euros por trayecto, aproximádamente.
- Horarios bus Praga – Pilsen: Cada hora de 8 am – 6 pm.
- Horarios bus Pilsen – Praga: Cada hora de 6 am a 7 pm.
Como puedes ver, por menos de 10 euros puedes ir y volver desde Praga a Pilsen en autobús en el mismo día sin ningún inconveniente.
Llegar a Pilsen en tren
La segunda opción para llegar a Pilsen en transporte público desde Praga es hacerlo en tren.
Los trenes parten desde la Estación Central de Praga y la frecuencia es muy alta, cada 30-60 minutos como máximo, hay un tren de Praga a Pilsen o a la inversa.
El trayecto dura 1 hora y 15 minutos y cuesta unos 13 euros ida y vuelta.
- Duración: 1 hora y 15 minutos
- Precio: 6,50 euros por trayecto, aproximadamente.
- Horarios tren Praga – Pilsen: Cada media hora de 5 am – 7 pm.
- Horarios tren Pilsen – Praga: Cada media hora de 5 am – 9 pm.
Puedes consultar más horarios y detalles aquí.
Visitar Pilsen en una excursión organizada
La última opción que tienes para conocer a fondo todo lo que hay que ver en Pilsen es hacerlo con una excursión organizada.
Hay algunas interesantes, como la que sale desde la capital, y que te lleva hasta Pilsen y Nenadovice desde Praga, una opción rápida para conocer dos bonitas ciudades de la manera más cómoda posible.
Más opciones dónde dormir en Pilsen
Aunque mucha gente visita Pilsen desde Praga, es posible que en una ruta por el país decidas pasar una noche en la ciudad, una alternativa agradable y mucho más tranquila que la capital.
Además del alojamiento que te menciono al principio del post y que me parece la ideal, te dejo algunas opciones. No todas las conozco personalmente, pero sí que me han hablado de ellas o al menos, las vi in situ durante mi visita a Pilsen.
- Hotel Plzeň, bien ubicado, bonito y muy cómodo. Una muy buena opción calidad-precio.
- Hotel Victoria, algo más alejado del centro, pero muy bonito y a muy buen precio. Además, Pilsen es pequeña y tampoco estás tan lejos de nada.
- Courtyard by Marriott Pilsen, un seguro de vida en cualquier viaje por el centro de Europa. Calidad-precio, de las mejores opciones en la ciudad.